El primer relato "Cartas de mamá" es una historia excelente donde se mezclan identidad, culpa e inercia en un extraño cóctel. "Los Buenos Servicios" me ha parecido posiblemente el relato más flojo del volumen aunque una vez más el juego de identidades que plantea resulta bastante fascinante, me ha recordado a los juegos que hace Auster en su trilogía de Nueva York, es más, al pensar en ello me parece que claramente Auster debe haber bebido bastante de Cortázar. En "Las Babas del Diablo" Cortázar se adentra en un terreno más oscuro e irreal, creando una historia que bien podría decirse que participa del estilo de horror del círculo de Lovecraft y sus mitos o al menos a mi me remitió a ello. "El Perseguidor" resuena fuertemente con su Jazz y una búsqueda que no es tal. El este relato, el más extenso del volumen, Cortázar reinventa a Charlie Parker a su antojo para poder reflexionar con él como base sobre la naturaleza del arte, el artista y la inspiración. Cerrando el volumen encontramos "Las Armas Secretas" que le da título. En este relato seguimos de forma confusa debido al estilo de la narración una historia de venganza y trauma magníficamente hilada.
Bueno, puedo después de este libro afirmar sin dudarlo que Cortázar me va a dar muchas alegrías en el futuro.
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